domingo, 6 de abril de 2008

HERMANO HUESO


No sólo hermanos, éramos unidos.
Muerte, primer hijo de mi madre
Y yo, éramos uno.
Como hermano mayor, me aconsejaba constantemente,
Me aguijoneaba, me espoleaba hacia mi bien.
Era brusco, incluso burlón, mas sin malicia.
La mayoría de la gente lo consideraba duro: de hecho,
mis amigos cercanos le decían Hueso
(en secreto) y me decían que era demasiado exacto,
severo en su perspectiva, cruel.
Tal vez lo era, nunca lo supe.
Yo lo seguía, lo idolatraba porque
era calmado, sabio, profundo a la forma
de todo lo viviente -cada hoja, pájaro, bestia
u hombre. Me enseñó cómo ver.
Existía una claridad, cada cosa poseía un halo
cuando Muerte, mi hermano Hueso
me la señalaba.
Nunca estuve solo.
Yo lo amaba, por su fría luz que mostraba
la verdad en las cosas.
Lo extraño ahora.

KENDEL HIPPOLYTE
SANTA LUCIA

No hay comentarios:

VISITANTES